2022: el papel de la Comunicación Interna ante la incertidumbre
25 de enero de 2022 Por Elena González del Álamo
Estas navidades nos han vuelto a poner en una situación de alerta con pocas certezas y mucha incertidumbre. Algunas organizaciones han vuelto al trabajo en remoto mientras todavía existen compañías donde sus empleados no han regresado a la presencialidad desde hace casi dos años. El desánimo, la fatiga y la velocidad de los acontecimientos, hacen aún más necesaria una nueva estrategia de conexión con los empleados. La Comunicación Interna se consolida en esta fase con enormes aprendizajes de tiempos recientes.
Así lo pudimos comprobar en el I Sondeo de Comunicación Interna y Experiencia de Empleado, realizado hace unos meses junto con Fundación máshumano, donde participaron las 100 mayores empresas de nuestro país. Un 98% de las participantes destacó que la Comunicación Interna ha aumentado su valor como elemento estratégico en la gestión de personas y el negocio.
Los empleados se posicionan como uno de los públicos prioritarios para las organizaciones, tomando un papel relevante en el posicionamiento estratégico convirtiéndose en los mejores prescriptores de marca.
El área de Comunicación Interna, con una visión cenital de lo que ocurre en los diferentes departamentos y de cuál es la estrategia corporativa, ha actuado de facilitador en la gestión de personas y se ha convertido en un actor clave para reducir la incertidumbre propia de estos tiempos, así como en un generador de alianzas y nexos para una mayor vinculación entre empleados y empresas, más aún en modelos de trabajo híbridos y en sectores en constante transformación o deslocalizados.
Además, en la era de la transparencia y la sobreexposición a la información, la prescripción de los públicos internos se convierte en la fórmula perfecta para el conocimiento y la credibilidad, aspectos clave en la atracción y fidelización del talento.
Las barreras entre la Comunicación Interna y Externa no existen. Esto hace necesario que los empleados sean los principales abanderados de la organización y comuniquen a su entorno de forma proactiva su experiencia y sentimientos. Un 55,81% de los encuestados señaló que la proactividad y la transparencia a la hora de comunicar ha sido uno de los factores determinantes para conseguir esa percepción positiva de los empleados, reforzada aún más con la involucración del liderazgo de la organización en el proceso comunicativo, trasmitiendo fiabilidad, confianza, cercanía y apoyo a las personas, para impulsar comportamientos alineados con el propósito corporativo.
Ante este contexto – donde los departamentos de Comunicación trabajan a prueba y error y necesitan ser más coherentes que nunca – la escucha activa, la medición y la retroalimentación, son ahora elementos esenciales para conocer y satisfacer lo que necesitan los equipos y redefinir si cabe una Nueva Propuesta de Valor que impacte positivamente en la Experiencia de Empleado.